El centro educativo, que funciona en la Fundación Oncológica Córdoba, surgió gracias a un convenio entre los ministerios de Educación y Salud, el Hospital y la Fundación en septiembre de 2014. Por lo tanto en septiembre de 2022 nuestra escuela cumplió 8 años.Un verdadero orgullo.
El objetivo de nuestra escuela es brindar herramientas para facilitar que las personas que pasaron por un tratamiento oncológico puedan regresar al mundo laboral; pero también se trata de un espacio más de acompañamiento, de encuentro entre adultos que pasaron o no por distintas circunstancias de vida y hoy deciden volver a estudiar.
“Las personas que atraviesan un tratamiento oncológico muchas veces tienen que interrumpir su trabajo durante 6, 8 o más meses. Luego de eso, a veces se presentan secuelas que pueden ser aparentemente mínimas pero lo bastante disfuncionantes a la hora de trabajar, o que requieran de más tiempo antes de volver a la normalidad”, explica Martín Alonso.
Este contexto ya es complejo para la reinserción laboral, teniendo en cuenta que usualmente los pacientes son adultos de más de 40 o 50 años. Si además no se cuenta con secundario completo, las oportunidades se cierran.
Por eso, “terminar los estudios formales significa no sólo una herramienta más para hacer frente a estos nuevos desafíos; sino que la educación de adultos también puede contribuir a configurar la identidad, tener un proyecto a futuro, reorganizar la vida y volver a la normalidad.»