Mi historia comenzó en La Rioja un 01 de Febrero del 2018 por la madrugada, mientras dormía en casa de Maricruz, mi ex pareja. Amanecí convulsionando, Mari no comprendía lo que me pasaba ya que no reaccionaba a lo que ella me decía y temblaba en su cama. Asustada recurrió a llamar a familiares de ella, su hermano Gabriel y un primo médico Anwar. Ellos concurrieron a su casa para ayudarnos. En el lapso de unos 15 minutos llegó la ambulancia de Hospital Vera Barros para estabilizarme.
Anwar sabía de un golpe que había sufrido meses atrás en una carrera de TRAIL RUNNING (deporte en el cual se corre por la montaña). Él les informa a los médicos que tenía una isquemia en el cerebro, para que sea derivado al área de neurología. Al llegar me realizaron varios estudios entre ellos una resonancia, encontrando un gran tumor frontal derecho el cual debía ser extraído, en menos de una semana, esos 7 días fui atendido de la mejor manera posible.
El día 08 de Febrero entré a las 09:30 al quirófano para ser operado, al hablar con los médicos me prometí en voz alta que antes de fin de año si o si tenía que hacer una ULTRA MARATÓN, carrera superior a 42 kilómetros. La operación duro cerca de 4:30 Hs. Todo salió perfecto, mi primera reacción fue mover los pies para saber si podía seguir caminando. Al realizarme los chequeos de reflejos me confirmaron que está todo perfecto, y pregunte si algún día podía volver a correr. La respuesta fue afirmativa pero debía estar varios meses inactivos para que suelde el hueso del cráneo. Mis temores empezaron a desaparecer. Mi recuperación fue rápida. Un solo día en terapia intensiva y un día en sala intermedia, al tercer día de la operación me dejaron volver a casa. Con dolores y mareos de cabeza productos de la cirugía. La biopsia dio que era un schwannoma (tumor del sistema nervioso periférico que se origina en el tejido que protege los nervios). La mejor forma de combatirlo y prevenir un nuevo crecimiento era hacer radioterapia. Fueron varias semanas, 30 sesiones aproximadamente. EL 27 de Junio realice mi última sesión.
Ese día la Dr. Bruno, encargada del tratamiento me autorizo a volver a mi vida “normal”, llegue a casa y me calce las zapatillas y volví a entrenar, pensando en mi próximo desafío, los 60k de Huerta Grande.
Fueron meses duros para la puesta en forma deseada, pero llegue a cumplir mi palabra, volver a correr una “Ultra” y finalizarla sin ser excluidos por los tiempo de cortes. La realice en 12:11´. Donde se me cruzaron varias cosas por la cabeza y comprendí que las metas son para romperlas y la mejor forma de superación esta en uno mismo.
Hoy me siento agradecido a los médicos, familiares, amigos que me apoyaron y me motivaron a realizar mi locura de volver a ser feliz.
Lo peor que te puede pasar saca lo más duro y fuerte que tienes adentro. Y como siempre digo antes de una carrera tripa y corazón.